Bipolar.

Si abres bien los ojos, te darás cuenta de que esta planeta esta dando sus últimos giros. No me gusta sonar fatalista, pero como decía un poeta "mi alma es festiva, pero el asunto es trágico".
En las noticias solo veo muerte, ladrones de cuello blanco paseando en Londres, y mi jefe sigue haciendo cuentas en su libretita mientras mi madre busca ofertas en Wal-Mart.
En la escuela veo estupidez a flor de piel. Mientras el profe moisés sigue inventándose una vida que jamás tuvo, los idiotas nos emborrachamos como si ese fuera el propósito de la carrera, imagino que las chicas guapas prefieren pasarse horas maquillándose que leyendo un libro y que los metrosexuales siguen llenando los gimnasios mientras que la biblioteca sigue vacía. Cuando llegue el apocalipsis, sin duda mi país será el primero en caer.
El amor sigue siendo una mentira piadosa para este mundo, el odio es un secreto a voces, el dinero es el mejor amigo de todos y los ambientalistas son robots que protestan sin saber por que.
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(Un cigarro después)

Mas de cien palabras y mas de cien mentiras. Joaquín Sabina se metió en mi casa para decirme que tenemos unas cuantas cosas que valen la pena en este mundo que se esta yendo al carajo. Después de todo, será divertido ver a esos metrosexuales cuando se vuelvan flácidos, o consolar a esas chicas guapas cuando sus jefes casados les nieguen futuro, una cerveza fría en la playa esta perfecto, y lanzar bolas de golf a los de Greenpeace desde una plataforma. Besar, abrazar, reír, sexo, drogas, rockandroll, dar un concierto para ti mismo, revolcarse en el pasto, sonreírle a los cara-larga del metro, ¡la música, por dios, la música!.
No se cuanto tiempo le quede a este planeta, estoy seguro de que veré en primera fila su final, pero antes de que eso suceda, me ocupare de mi, como buen misántropo, como buen tipo solitario. Tratare de no ser parte directa de esta sociedad y me las arreglare para firmar pacto con el diablo.